Muchos son los beneficios y la ventajas de usar plataformas elevadoras (PEMP) o Manlift en los proyectos o en las actividades laborales, y mucho más cuando se cuenta con personal formado y especializado en el manejo de estas.
Como en toda labor o actividad profesional, entre mas formación tenga la persona mucho mejor va a desarrollar su trabajo y mas satisfacción le dará a la compañía, lo mismo ocurre con el personal que maneja y se involucra activamente en plataformas elevadoras; un operario sin formación y entrenamiento podría llegar a generar situaciones de riesgo y desaprovechar la eficiencia y rendimiento que proporciona este tipo de maquinas a su labor; así tendríamos como resultado, una perdida laboral que se traduciría en pérdida de tiempo y economía.
Por la razón anterior, es importante que los operadores responsables de manipular las plataformas elevadoras reciban previamente una formación práctica y teórica que los lleve a ser capaces, no solo de trabajar en ellas, sino de tener la capacidad de reaccionar ante cualquier tipo de situación ajena al funcionamiento normal o a una circunstancia de riesgo generada por el Manlift o por el entorno.
En CGB SAS recomendamos a los usuarios de Manlift a garantizar que cada trabajador reciba la capacitación necesaria, tanto en el momento de la contratación, cualquiera que sea su modalidad o duración, como cuando se generen cambios en las funciones que desempeña el empleado o se introduzcan nuevas tecnologías y cambios en los instrumentos de trabajo. Esto es de gran importancia, ya que, la mayoría de plataformas elevadoras se dan en régimen de alquiler, de manera que es muy usual que los operadores usen diferentes tipos de Manlift , lo que quiere decir que se generan cambios en equipos de trabajo, funciones y formas de usos.
Algunos criterios básicos sobre la formación que debe tener el operario deben ser:
– Formación teórica: Tomar los cursos ordenados y determinados en cada país que regulen el trabajo en alturas y el trabajo con plataformas elevadoras.
– Conocimiento de las medidas preventivas (normas de circulación, riesgos laborales, reglas de estabilidad, dispositivos de protección, distancias de seguridad y señalización, utensilios de trabajo, normas de mantenimiento básicas)
– Formación práctica: en esta parte el operario debería: tener contacto con el equipo de trabajo, practicar el manejo del equipo, practicar los movimientos del equipo con carga, simulación con trabajos o situaciones de alto riesgo, entre otras.
Siguiendo este tipo de recomendaciones, el empresario impulsará un ambiente de trabajo más seguro y de total bienestar, y además proporcionará un mejor rendimiento a la obra en la que se encuentre trabajando.